Sé perseverante y alcanza tus sueños
¿Has sentido que te falta pasión para hacer las cosas? ¿No te inspiras fácilmente? ¿Te cuesta empezar una actividad si no tienes una recompensa por hacer?. Si te sientes identificado sigue leyendo, porque debes saber que, lo que te pasa tiene solución y se llama perseverancia.
No eres rara o raro, ni diferente, la gran mayoría de las personas tienen el gran problema de la falta de perseverancia, solo que un pequeño porcentaje de personas son perseverantes y precisamente son ellos los que alcanzan sus sueños.
La perseverancia tiene mucho que ver con la recompensa y es porque, quienes no logran ser perseverantes, dejan de serlo debido a que no tienen la motivación correcta y están ansiosos por recibir una recompensa inmediata.
Vivimos en un mundo dominado por la urgencia y la inmediatez, a veces somos tan impacientes que lo queremos todo para ya, pero al no obtener una recompensa inmediatamente después de un esfuerzo, podemos tener la impresión de que no ha merecido la pena y eso hace que pospongamos o abandonemos nuestros objetivos.
Te invito a tener una actitud positiva a que no te dejes llevar por los pensamientos de desánimo que te dicen “Ahí vas otra vez, pero si ya lo has intentado tantas veces y nunca lo logras.” Quiero confesarte que cuando me pasa eso, me pongo a repetir en voz alta un versículo que me llena de ánimo y me impulsa para seguir perseverando. Está en Isaías 43:18-19 Dios nos dice: “Olviden las cosas del pasado, ya no vivan ahí, voy a hacer algo nuevo, ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto y ríos en lugares desolados”. No estamos solos en esto, Dios va con nosotros en este proceso, lo que no hicimos antes, ya fue, lo que éramos antes ya no somos hoy, tu otra versión no termina lo que empiezas, pero tu versión de hoy, ya es consciente de lo que debe hacer y merece la oportunidad de mostrar que esta vez sí lo harás, no te rindas, recuerda que aunque suene trillado “El que persevera alcanza”. Disfrutar del camino, y de el paso que te conducen hacía tus objetivos.
Pido en oración que de sus gloriosos e inagotables recursos, dios te fortalezca con poder en tu ser interior por medio de su espíritu. (Efesios 3:16)
Con Cariño Cecy Reséndiz
